Beneficios de la presoterapia
La presoterapia secuenciada es un tratamiento terapéutico muy usado en medicina estético, así como en fisioterapia y en angiología por favorecer el drenaje linfático, tratando el problema de la retención de líquidos y los problemas circulatorios. Un método excelente para prevenir y evitar las varices y la indeseada celulitis.
Contraindicaciones de la presoterapia
Muchas personas padecen trastornos circulatorios y una importante retención de líquidos, sobre todo las mujeres. En ocasiones es provocada por la toma de ciertos medicamentos o por anticonceptivos orales que como efectos secundarios hacen que el cuerpo retenga más líquidos de los que debería, en especial en la zona de la cintura y piernas.
La presoterapia consigue aumentar la tasa de metabolismo basal, es decir, el gasto energético, la cual disminuye con el paso de los años. Este método se realiza con una especie de “botas” que recubren las zonas a tratar como las piernas y glúteos, por las que se realizan una presión positiva (a través de ondas) estimulando el sistema circulatorio. Al calentarse el cuerpo, la velocidad de la sangre aumenta, por lo que el trabajo del cuerpo será enfriarse inmediatamente y, para ello, deberá hacer uso de energía procedente de la grasa.
Por ello, los resultados de la presoterapia son varios y eficaces: aumento del flujo linfático y venoso, oxigenación de tejidos, mejora de la circulación, prevención de la celulitis, eliminación de grasa corporal y de líquidos extracelulares. Este proceso tiene unos resultados visibles con una mejoría de la elasticidad de la piel.
Con la presoterapia podremos disminuir la celulitis, aliviar también el dolor de los músculos por la mejora de la circulación, ya que es un tratamiento que se puede aplicar en varias partes del cuerpo: desde las piernas, ingles, glúteos, abdomen hasta los brazos. Las sesiones tienen una duración de 25 minutos, pudiendo realizarse tres sesiones a la semana al tratarse de un tratamiento agradable por la sensación de masaje que provoca.
Durante el embarazo, muchas mujeres se tratan con presoterapia para aliviar la sensación de pesadez en las piernas por la retención de líquidos, así como para tener una piel bonita y tonificada, al igual que en la época del postparto para recuperar la figura anterior.
Está contraindicada la presoterapia en personas que padecen hipertensión arterial severa, insuficiencia cardiaca y descompensación cardio-respiratoria, trombosis venosa profunda, infecciones cutáneas locales y linfangitis, Síndrome de Klippel-Renaunay, ausencia total de linfáticos a nivel proximal de la extremidad afectada, así como una patología arterial de importancia.
Estas técnicas deben ser aplicadas por personal altamente formado, porque una mala aplicación puede tener efectos negativos sobre el organismo. Por eso, en Nutridelia contamos con un equipo profesionalizado con conocimientos y práctica avalada en equipos de última tecnología como los que se ponen a disposición del cliente.