Indice de masa corporal ideal
¡Quiero adelgazar! Tras esa primera y voluntariosa afirmación, viene la pregunta obligada ¿cuál es tu índice de masa corporal? Antes de aplicar un tratamiento para adelgazar, es necesario conocer si la persona está en su peso o si por el contrario necesita incrementar o disminuir la ingesta de nutrientes en su organismo. Pero… ¿qué es el IMC? Es la primera pregunta que nos viene a la cabeza.
El índice de masa corporal (conocido comúnmente por sus siglas IMC) sirve para medir el sobrepeso u obesidad en las personas a través de la relación peso-altura. Para obtener estos resultados se divide el peso en kilos por el cuadrado de su altura en metros (kg/m2), como indica la Organización Mundial de la Salud. En adultos mayores de 18 años no se tiene en cuenta la variable de sexo para el cálculo, excepto en los niños donde el valor varía teniendo en cuenta la edad y sexo.
Valores de índice de masa corporal (IMC)
Según los parámetros marcados por la OMS, un IMC igual o superior a 25 equivale a sobrepeso y si es igual o superior a 30 se considera obesidad. Dentro de esta horquilla de valores, encontramos:
- Si es menor a 15, equivale a infrapeso.
- De 15 a 18.49, estado de delgadez.
- De 18.5 a 24.99, peso normal.
- De 25 a 29.99, sobrepeso.
- A partir de 30, indica obesidad.
Para calcular el índice de masa corporal, existen numerosas básculas que permiten saber esos valores y que suelen ser utilizadas en clínicas o centros de adelgazamiento. En ocasiones se obtienen resultados similares en algunas personas que físicamente tienen diferencias de grosor, hecho debido a que el resultado del IMC es indicativo. Es en este proceso cuando se necesita conocer cuáles son los nutrientes necesarios para cada persona y realizar una dieta saludable.
El IMC en el tratamiento nutricional
En la actualidad, el índice de masa corporal es una herramienta imprescindible para una primera toma de contacto ante un tratamiento adelgazante o un control nutricional. Esta importancia reside en el aumento de la obesidad en el mundo, habiéndose convertido en casi una epidemia en países desarrollados como en Estados Unidos, donde se empiezan a aplicar planes nutricionales impulsados por rostros conocidos como Michelle Obama con su programa Let’s Move!
En los últimos años la obesidad y el sobrepeso están entre los primeros cinco factores de riesgo de mortalidad e influye en otras dolencias que se incrementan con el aumento del IMC, según datos de la OMS. Por ello, es recomendable mantener una alimentación sana y equilibrada, realizando una dieta que aporte al organismo los nutrientes específicos que necesita y teniendo en cuenta las variables externas que influyen en cada persona (vida sedentaria, deportista, consumidor de fast food, etc.).