El verano tiene infinidad de cosas buenas. El sol, las vacaciones, los días más largos, las reuniones de amigos, la playa, la montaña… ¡Y la ensalada! Es la reinas indiscutible del verano, quizá seguida por el gazpacho. Para las chicas de ‘Sexo en Nueva York’ esta delicia mediterránea era su plato fetiche, pero su éxito no radica precisamente en la elección de Carrie. Es de fácil preparación, rápida, fresca y se puede tomar en cualquier parte, lo que facilita el cuidado de nuestra dieta.
Quienes puedan salir de casa para disfrutar de unas vacaciones, seguramente aprovecharán sus días para romper con su dieta y con su rutina. Es fácil regresar con unos kilos de más. Nos encontramos en un lugar diferente, comemos a otras horas, cambiamos nuestros hábitos diarios e ingerimos cenas más copiosas. Sin embargo, siempre podemos aprovechar para hacer deporte y comer sano. Las vacaciones no están reñidas con la dieta equilibrada. En ella, la ensalada siempre será una elección fácil y perfecta.
Pero, ¿qué hace tan atractivas a las ensalada para una dieta?
- Hidrata y refresca. El componente mayoritario de la lechuga es el agua, lo que la convierte en un alimento fresco y ligero. Recordemos que una buena hidratación es clave en verano. Si además le añadimos otras verduras u hortalizas como el pepino o el pimiento, conseguiremos una composición de agua de casi el 90%.
- Es ligera. La ensalada no engorda. Las verduras tienen alrededor de 13 kilocalorías por cada 100 gramos, dejando todo el papel a los nutrientes. Además, por su contenido en fibra y la masticación que precisa para ingerirla, consigue un efecto saciante que hará que nos llenemos antes.
- Contiene vitaminas y minerales. Tras horas de playa, paseos y sol, es normal sentirnos cansados. Los micronutrientes que contiene la ensalada ayudan a regular nuestros procesos orgánicos.
- Ayuda a eliminar toxinas. Tiene una acción diurética y depurativa debido a la gran cantidad de composición en agua que contiene. También contiene potasio y aporta muy poco sodio.
- Protege la piel. Las verduras crudas guardan todo el poder de las vitaminas, minerales y de componentes antioxidante que impiden una aceleración en el envejecimiento de las células. ¿Sabes qué otros alimentos son buenos para proteger nuestra piel del sol?
- Regulan el tránsito intestinal. En verano, sufrir estreñimiento es algo habitual. También cuando salimos de casa. Una dieta rica en verduras, hortalizas y frutas nos ayudará con este problema gracias a su alto contenido en fibra.