La mayoría de las personas asociamos el verano con la piscina, la playa, la montaña, el relax, las terrazas y los viajes. Pero lo cierto es que un gran parte de la población también sufre estrés y ansiedad durante este periodo del año.
No importa que seas funcionario, autónomo, jubilado, opositor o estudiante. Todos podemos sufrir este problema. Y aunque en las redes sociales parezca que el verano es la época de la despreocupación, el postureo y los viajes de ensueño, nadie está exento de sufrir frente a algún factor que nos afecte de manera negativa, ya sea física o mentalmente.
Los síntomas del estrés son numerosos. Puede aparecer como unos simples pensamientos negativos o ansiedad, como sensación de fatiga, insomnio, falta de concentración, dolor de cabeza, mareos, cambios en el humor y en el apetito ó debilitando nuestro sistema inmunológico, entre otros. Esto puede estropear tus días libres, mermar tu productividad o el rendimiento en el trabajo y provocarte una sensación de insatisfacción constante. Así que este verano, dile adiós a tu estrés.
Aquí te proponemos algunas rutinas que te ayudarán a minimizar la sensación de estrés.
- Disfruta de la comida. La alimentación es uno de los motores de tu organismo, por lo que es importante que dediques tiempo a saborear la comida y a disfrutar de ella. Evita la televisión mientras comes, céntrate solo en ella y mastica bien cada bocado. Esto también te ayudará a no engordar. Opta por comidas que te ayuden a hidratar tu cuerpo para combatir el calor, evita los alimentos altos en grasas saturadas y las bebidas alcohólicas.
- Las horas de sueño son fundamentales. Aprovecha para ajustar tus horarios. El calor y el descanso incorrecto pueden empeorar la sensación de estrés, por lo que es muy importante intentar descansar alrededor de 8 horas diarias. Cuida también tu postura, las condiciones de silencio, la luz y el entorno. Intenta mantener una rutina aunque durante el fin de semana o en las vacaciones te retires a dormir más tarde.
- Haz deporte. La actividad física es fundamental para deshacernos del estrés y liberar endorfinas, las encargadas de generar el sentimiento de la felicidad y mejorar nuestro estado de ánimo. Depende de tu estado físico, puedes optar por el yoga, el running, la natación, el senderismo o cualquier deporte al aire libre. Eso sí, evita las horas altas de sol y ponte la música que más te gusta para hacerlo más llevadero si no estás acostumbrado a practicar.
- ¡Cuídate! Busca momentos del día para tí y rodéate de las personas que mejor te hacen sentir. Socializa y aprovecha tu tiempo.
- Estimula tu creatividad. Pintar, escribir, bailar o hacer manualidades pueden resultarte de gran utilidad para romper con tu rutina, escapar del estrés o mantener tu mente centrada en una actividad positiva. Mejorarás además tu concentración y reforzarás tus capacidades.
- Aprende técnicas de relajación y meditación. Son aconsejables para su práctica diaria y también te ayudan a mejorar tu concentración y tu autoestima.