Una escapada de fin de semana a la playa, las vacaciones o largas tardes de piscina son el plan perfecto para superar los días de calor sofocante que sufrimos durante la época estival. Llega la época de lucir nuestra piel morena, pero para conseguir un buen bronceado es necesario tener en cuenta algunas recomendaciones para reducir el riesgo de padecer quemaduras, envejecimiento de la piel, deshidratación o incluso cáncer de piel.
Una de las cosas más importantes a la hora de exponernos a la radiación solar es elegir un buen protector para nuestro cuerpo, teniendo en cuenta su factor de protección. Lo complementaremos con otro para nuestra cara con el objetivo de prevenir también la aparición de manchas faciales.
Además, en épocas de altas temperaturas es importante que nos hidratemos bien, pues durante el verano, nuestro cuerpo pierde más agua que durante el resto del año. Por eso, es fundamental tomar medidas preventivas, usar protector solar todos los días y aumentar la ingesta de los alimentos que minimizan estos efectos. El agua y los zumos de frutas naturales pueden ser algunos de nuestros mejores aliados. Sin embargo, también hay otros alimentos que nos pueden ayudar a protegernos del sol.
¿Qué alimentos son buenos para protegernos de los rayos ultravioleta? Ahí van algunas recomendaciones:
- Los frutos rojos contienen licopeno y carotenoides, los cuales generan una protección contra las irritaciones óseas ocasionadas por el sol.
- Las zanahorias son un alimento conocido en cuanto al cuidado de la piel, ya que es una fuente principal de beta-caroteno, un antioxidante que se sintetiza en vitamina A dentro del cuerpo.Este nutriente esencial es clave para la reparación de los tejidos celulares, ya que fortalece la dermis y reduce el impacto negativo del sol.
- Cualquier pescado azul (salmón, sardinas, anchoas…) es una fuente máxima de ácidos grasos omega 3, un tipo de aceite saludable que aumenta la permeabilidad de las membranas para conseguir un funcionamiento celular óptimo.También, gracias a su vitamina E, aceleran el proceso de reparación de la piel, sobre todo en caso de quemaduras y manchas en la piel.
- El chocolate negro, fabricado con más del 60% de cacao, es un buen complemento alimenticio para proteger nuestra piel contra las agresiones del sol. Al contener flavonoides (unos poderosos antioxidantes) mejora la capacidad de la piel para protegerla de quemaduras solares y mantenerla hidratada. Eso sí, su ingesta debe de ser controlada.Sin abusar.
- Los vegetales de hojas verdes tienen una gran cantidad de antioxidantes que protegen nuestra piel de los radicales libres. Su contenido de beta-caroteno, sumado a su ácido fólico y vitamina E, mejora la actividad celular y crea una capa protectora contra los rayos UV del sol. Además, contienen poderosos antioxidantes que se han relacionado con la prevención del cáncer de piel y las arrugas.