Nuestra salud puede mejorar con unos pequeños cambios en la alimentación, sólo tenemos que conocer qué alimentos nos van mejor y si tenemos intolerancia o sensibilidad a alguno de ellos.
La alimentación consciente nos ayudará a vivir mejor y a mantenernos en un peso saludable.
¿Somos lo que comemos? No podríamos ser tan categóricos, pero lo que sí sabemos es que, lo que comemos condiciona nuestra salud; en nuestra cesta de la compra hay alimentos más o menos saludables y, además, nuestro organismo asimila mejor unos que otros e incluso puede se intolerante a algunos de ellos.
El consumo de alimentos a los que somos intolerantes, pueden provocar molestos síntomas e incluso afectar a nuestro sistema inmune que, al sobrecargarse puede acelerara el avance o provocar la aparición de enfermedades como la candidiasis crónica, la celiaquía, la depresión o enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide o la enfermedad de Crohn, entre otras.
La intolerancia a la lactosa o la celiaquía, son dos de las afecciones relacionadas con la alimentación de las que más se habla en la actualidad.
La intolerancia a la lactosa, que afecta en torno al 40% de la de la población en España, se debe a la reducción de la presencia de la lactasa en nuestro organismo con el paso del tiempo. Sus consecuencias sobre el aparato digestivo (hinchazón, flatulencia, diarrea…) no se consideran graves y pueden confundirse con otro tipo de patologías.
Los expertos consideran que la intolerancia a la lactosa debe diagnosticarse de forma profesional; las modas pueden hacer que dejemos de consumir lácteos y perder el aporte de calcio, vitaminas A y D o ácidos grasos.
Por otra parte, la enfermedad celíaca es un síndrome autoinmune que se desencadena por la ingesta de gluten de trigo, cebada, centeno y avena por parte personas genéticamente susceptibles a padecerla. Se estima que en España podrían padecerla en torno a 500.000 personas y se caracteriza por la inflamación de la mucosa en el intestino delgado que impide la absorción de nutrientes, esenciales para nuestro organismo.
Lo que no debes olvidar para mantener tu salud
Si la alimentación es importante, no lo es menos el estilo de vida, con el ejercicio moderado y el descanso como ejes del mantenimiento de la salud
- Haz ejercicio a diario; caminar durante 60 minutos cada día, es un hábito que no requiere aprendizaje y ayuda a prevenir las enfermedades cardiovasculares o la osteoporosis, a perder peso, o combatir la depresión.
- Descansa; omo dice el experto en sueño, el doctor Merril Mitler, “el descanso afecta a los tejidos del cuerpo”. Las hormonas del crecimiento y del estrés o el sistema inmunitario, pueden verse afectadas por la falta de sueño. El número de horas que una persona necesita para descansar, varía, pero la Organización Mundial de la Salud recomienda que las personas adultas durmamos entre 7 y 8 horas.
La salud mental también puede verse afectada por la alimentación
Este año, la celebración del Día Mundial de la Salud está dedicada a la depresión (http://www.who.int/campaigns/world-health-day/2017/event/es/), una patología mental que afecta a más de 300 millones de personas en todo el mundo cuyo origen puede ser diverso. En nuestro entorno, hay alimentos que nos puede ayudar a combatirla:
- La vitamina C que encontramos, sobre todo, en los cítricos y en el kiwi, es antioxidante y contrarresta los efectos del estrés.
- Las legumbres, los frutos secos, los cereales o la leche, contienen vitamina B y triptófano, un activador de la serotonina.
- Los ácidos grasos Omega 3 del pescado azul o las nueces.
- Los alimentos que pueden normalizar las funciones del sistema nervioso central porque contienen litio, potasio o magnesio en altas cantidades.
¿Te gustaría saber qué comer para mantener la salud?
En Nutridelia somos conscientes de la importancia del mantenimiento de la salud al tiempo que se sigue una dieta de adelgazamiento, por eso siempre comenzamos nuestra relación con los clientes con un estudio completo de la salud y un análisis de la composición corporal. Además, si es necesario, analizamos las intolerancias alimentarias, las necesidades nutricionales según el ADN y la tendencia genética al sobrepeso.
Estamos especializados en dietas proteinadas pero incluso éstas, se prescriben de forma individualizada a cada persona, según sus necesidades. Para nosotros es importante la información que obtenemos sobre la nutrición óptima para cada uno porque lo que intentamos es modificar los malos hábitos de vida y que nuestros clientes se mantengan en un peso deseado y saludable el mayor tiempo posible.